domingo, 4 de octubre de 2015

18!

¡¡Hola a todos!!

Estoy de vuelta después de cuatro semanas desaparecida. Hoy no os traigo receta, tenía ya un post preparado pero planes sorpresa de la vida hacen que os traiga uno completamente distinto al que tenía pensado.

En estas cuatro últimas semanas han habido muchas cosas nuevas en mi vida, he empezado la uni y he conocido a gente nueva estupenda. Y a parte de todo esto....


...resulta que esta semana he cumplido 18. Si jajajaja ya soy oficialmente mayor de edad. El caso es que ayer por la tarde iba a celebrarlo con la familia, una pequeña merienda para soplar las velas en familia nada más. Mi madre se encargaba de todo y lo que yo pensaba que sería una tarde en familia al final resultadó ser una pequeña fiesta de cumple con unas pocas amigas. La verdad es que la sorpresa fue preciosa, me gustó mucho e incluso me emocioné sii jajajaja. 


Y bueno la merienda fue más que perfecta mi madre junto con mi hermana prepararon una mesa preciosaa. Una mesa de esas con las que sueña una y es que a mi todo lo que son mesas dulces y organización de eventos me encanta, me paso tardes viendo fotos jajajjja


Y no podrían haber acertado más,  cuidarón hasta el más mínimo detalle y estaba todo riquísimo. Todo respetando una gama de colores establecida. Desde las servilletas a los vasos pasando por las cucharitas de madera (forradas con un washi tape precioso), las pajitas y los platos de estrellitas doradas, hasta las cajitas blancas, las estrellas y confeti en el mantel, la letra B luminosa y los pompones colgando del techo. Era todo precioso.


En cuanto a los dulces, ellos también respetaban el código de colores, habían chucherías a mogollón, unos mini cupcakes que ha encargado mi madre que estaban riquísimos y como no podía ser de otra manera, un pastel para soplar las velas, en este caso el inigualable pastel de chocolate de mi abuela, sencillo pero que no falta en ningún cumpleaños de la familia, es el mejor. 




Bueno espero que os guste tanto como me ha gustado a mí, la verdad es que la tarde fue estupenda, pasamos un muy buen rato y no podría estar más agradecida. Primero a toda mi familia por todo lo que hacen por mí y lo mucho que me quieren y obviamente también a mis amigas por su visita sorpresa que me encantó y por todo, que ya son muchos años y los que quedan.






Y después de todas estas fotos, esto es todo, nos vemos la semana que viene, esta vez sí con receta asegurada. 

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